Audi continúa con su expansión internacional, Ian Henry analiza cómo se afronta el papel a largo plazo de Audi dentro del Grupo VW
Audi se expande globalmente, especialmente en China, y busca olvidar su pasado controvertido. La participación en el escándalo del diésel que afectó al Grupo Volkswagen, llevó a la marca a sufrir sanciones notables en Estados Unidos y Europa. En octubre de 2018 Audi recibió una sanción más de €800m en los tribunales alemanas por sus irregularidades con los motores V6 y V8. Curiosamente, tan solo €5m de la sanción se corresponden a ‘irregularidades normativas’ mientras que los €795m restantes se refieren a los beneficios económicos que habría obtenido Audi por el uso de los motores infractores.
La empresa aceptó esta nueva sanción y renunció a presentar recursos con el fin de dejar en el pasado estos eventos. Sin embargo, no se sabe si aquí se acaban los procesos en Alemania o si este resultado podría exponer a la empresa a más acciones y sanciones en otros países. VW y Audi ya pagaron en conjunto unos 20 mil millones de euros en sanciones y compensaciones tan solo en Estados Unidos y no sería sorprendente que Estados Unidos aplique otras sanciones en el futuro. Podría tambien ser el final de la exposición de la marca a las infracciones pasadas, por lo menos en Europa, las cortes alemanas y estadounidenses podrían continuar con las acusaciones.
Por lo que ahora se analiza el papel crucial que ha jugado Audi en su colaboración con la marca Volkswagen, con el uso de las plataformas de VW y la transferencia de su propia tecnología al resto del Grupo VW, especialmente en I+D. En noviembre de 2018 surgieron algunos informes en los que se sugería que Audi podría quedar marginada en el nuevo plan a 10 años del grupo VW mientras se inicia una vinculación estrecha entre Volkswagen y Ford. El CEO del grupo VW, Herbert Diess, desvelará la nueva estrategia a mediados de noviembre y se espera que haya una limitación del liderazgo de Audi como centro de desarrollo del grupo.
Los planes provisionales también incluyen una cooperación notable con Ford en la producción de vehículos comerciales ligeros y vehículos eléctricos. Los vehículos eléctricos es un área especialmente importante para Audi, ya que ha sido el líder tecnológico del grupo en este sentido durante los últimos años. Sin embargo, a pesar de haber construido versiones del A8 con tecnología de vanguardista de conducción autónoma, existe la percepción de que no se encuentra a la altura de otras tecnologías de empresas emergentes como Waymo. Este es uno de los motivos de la nueva estrategia de VW y la más que probable asociación en varias áreas con Ford. Sin embargo, a pesar de que no está confirmada la posición de Audi en el desarrollo dentro de VW, su propia red de producción vive varios avances y es importante indicar cuál será la base productiva en el crecimiento futuro de la marca. Audi cuenta con dos plantas principales en Alemania: su sede principal en Ingolstadt, con capacidad para 600,000 vehículos anuales y otra en Neckarsulm con una capacidad anual de 300,000 unidades.
También cuenta con una planta con capacidad para 160,000 unidades en Gyor, Hungría, y otra planta en Bruselas rediseñada para producir los vehículos eléctricos e-tron con una capacidad inferior a los más de 100,000 modelos A1 que producía anteriormente. El modelo A1 se produce ahora en la planta de SEAT en Martorell, Barcelona.
Fuera de Europa cuenta con una planta para 150,000 unidades en México que suministra a todo el mundo los SUV Q5, también cuenta con varias plantas en China, donde su red productiva crece rápidamente. La marca realizó grandes inversiones en toda su red productiva para convertir sus plantas en ‘fábricas del futuro’ con la implementación de los principios de la industria 4.0. La planta de Ingolstadt lidera estas implementaciones, las líneas convencionales de ensamblado son ahora modulares, utiliza drones, carretillas autónomas, láser y robots en niveles muy superiores que en el pasado.
Audi decidió que las líneas de ensamblado tradicionales no funcionan bien en la gran variedad de versiones disponibles en todo su rango. La solución son las líneas de ensamblado modulares donde vehículos de complejidad variable y diferentes especificaciones son transportados por robots autónomos a la posición adecuada en la nave de ensamblado donde se encajan los componentes o se avanza en los procesos. De esta manera, los modelos con especificaciones más sencillas avanzan más rápido en la ‘línea’ ya que no tienen que pasar por las estaciones que no les son relevantes.
Audi decidió que las líneas de ensamblado tradicionales no funcionan bien en la gran variedad de versiones disponibles en todo su rango.
De esta forma los vehículos parecen circular por toda la fábrica en patrones inusuales, pero Audi asegura que los sensores y la tecnología GPS permiten localizar cada uno con un margen de cinco centímetros. También se pueden transportar los módulos grandes al vehículo, por ejemplo, en Ingolstadt 16 AGV o robots autónomos transportan las pesadas unidades de aire acondicionado de los modelos A3 y Q2 a medida que los vehículos avanzan en la línea de ensamblado.
Las técnicas de la industria 4.0 se utilizan también en otros puntos de Ingolstadt; por ejemplo, un sistema de cámaras denominado CleverKlaus controla y envía informes sobre tareas sencillas pero cruciales como la aplicación de electrónica en las puertas, una máquina denominada LBR inserta automáticamente tornillos en la parte inferior del vehículo mientras que FlexShapeGripper es un brazo que puede adaptarse a la forma y tamaño del componente y rellenar las bandejas y cajas junto a la línea de ensamblado. Audi también utiliza drones para entregar componentes como los volantes u otras partes de hasta cinco kilos en rutas aéreas programadas dentro de la fábrica.
Otro desarrollo tecnológico interesante en Ingolstadt es la presentación inminente en producción de una pintura de dos tonos en un único proceso de pulverizado. El nuevo proceso evita el lento y laborioso proceso de enmascarado que se requiere para pintar en dos tonos. Se está ensayando actualmente en Ingolstadt, y la versión de producción del proceso entrará en servicio durante 2019.
Bruselas: liderando el cambio medioambientalEn Bruselas se produjo recientemente un cambio fundamental, la fábrica pasó de producir 100,000-125,000 unidades del A1 a menos de la mitad de unidades del vehículo eléctrico e-tron, aunque Audi querría producir más de 100,000 unidades del e-tron en Bruselas en el futuro. El primer e-tron, un modelo SUV, se presentó en la feria del motor de París y ya se encuentra en producción, a mediados de 2019 se añadirá una versión Sportback.
Además de su remodelación para producir vehículos eléctricos, Bruselas recibió también el certificado de emisiones neutrales de CO2 en su proceso de producción, el 95% de la energía procede de fuentes renovables y el 5% restante se compensa con proyectos medioambientales. Entre las medidas concretas para mejorar la eficiencia energética de la producción del e-tron se encuentran: un ahorro del 30% de energía en el taller de carrocería, donde el uso de agua caliente en el sistema de control climático ahorra 3,500 horas de megavatios al año. Los paneles fotovoltáicos cubren 37,000 metros cuadrados en el techo de la fábrica, lo que ahorra emisiones de 700 toneladas de CO2; y los cambios en los sistemas de filtrado y residuos en el taller de pintura ahorran 50 toneladas en disolventes y otros residuos anualmente.
Las producción del SUV e-tron comenzó a pequeña escala en septiembre, aunque en octubre se retrasó un mes el lanzamiento de la producción plena. La parada se debió a unas actualizaciones de software que exigían la autorización normativa (algo desafortunado e irónico teniendo en cuenta los problemas de Audi con los motores diésel); además, surgieron noticias de que el proveedor de baterías de iones de litio LG Chem podría presentar problemas en la negociación de precios, aunque las propias baterías se producen dentro de la planta en el antiguo centro logístico. El eje de transmisión (motor, transmisión y electrónica de potencia) se ensamblan en la planta de Audi en Gyor.Hungría: Modelos SUV eléctricosLa planta de Gyor ha sido durante mucho tiempo la principal planta diésel de Audi (con unos 900 motores diarios), también produce el rango deportivo TT y las versiones sedán y cabrio del A3. Es probable que los modelos A3 se trasladen a Ingolstadt ahora que el Q3 se traslada de España a Hungría y se espera que la versión cupe del Q4 llegue en un futuro cercano.
Además, Gyor es la planta líder de Audi en la producción de motores eléctricos. Inicialmente producirá hasta 400 motores eléctricos al día y tiene capacidad para aumentar esta cifra. Las primeras unidades llegaron a la planta del SUV e-tron en Bruselas y también se enviarán a Neckarsulm, que producirá el e-tron GT a finales de 2019 o principios de 2020 a medida que Audi expande su rango de vehículos eléctricos. Los motores y transmisiones eléctricas se producen en celdas modulares en lugar de líneas de ensamblado tradicionales, los vehículos autónomos y robots entregan las piezas a los trabajadores en las diversas fases de la línea de ensamblado modular.
Gyor también ensayó un rango de dispositivos ergonómicos que ayuden a reducir el esfuerzo y la carga de los trabajadores de la línea de ensamblado. Por ejemplo, comenzó a utilizar una ‘silla sin silla’, una especie de exo-esqueleto ergonómico que reduce el nivel de esfuerzo de los trabajadores en piernas y cintura.
Audi construyó un nuevo taller de carrocería para el Q3 en Gyor con 700 robots con lo que aumentó la capacidad hasta 160,000 unidades anuales, una única línea de ensamblado final produce todos los modelos de Hungría(Q3, TT cupé y roadster, y por ahora por lo menos, ls A3 sedán y cabrio). Además de la producción de vehículos y motores, Audi Hungría también desarrolla su capacidad de I+D con un nuevo centro de motores eléctricos y diésel que abrirá en 2019/20.
El motivo del traslado del Q3 a Gyor es liberar espacio en Martorell para producir el Audi más compacto, el modelo A1. Este modelo comparte la plataforma MQB A04 con los modelos SEAT Ibiza y Arona en la línea 3 de Martorell, que opera en dos turnos y creó 500 puestos de trabajo para el lanzamiento de los modelos Arona y A1.
México: La llegada de Audi a Norteamérica tiene un impacto globalFuera de Europa, la nueva planta de Audi en San José Chiapa, en México, ya es completamente operativa y suministra vehículos a todo el mundo y componentes a Audi China. La producción comenzó en septiembre de 2016 con el modelo SUV Q5 que transfirió su producción desde Ingolstadt. La planta mexicana también fue la primera fábrica de Audi construida fuera de Europa (la producción de Audi en Brasil e India se realiza en plantas del grupo y la producción en China se realiza a través de empresas conjuntas).
En 2017 la planta produjo más de 158,500 unidades del Q5 y produjo un número similar el año pasado. El 95% de la producción se exportó a Estados Unidos, Europa y China, que recibe partes y kits CKD. Las exportaciones a Estados Unidos viajan en ferrocarril hacia el norte y también hacia la costa este al puerto de Veracruz para su envío a Europa; las exportaciones a Asia se realizan a través del puerto de Lázaro Cárdenas en la costa oeste.
Cerca de la planta de San José Chiapa se está construyendo una ciudad completamente nueva, Ciudad Modelo, una ciudad diseñada principalmente para los trabajadores de la planta. Antes de ello Audi necesitaba traer a sus trabajadores desde más de 50 km de distancia. La fábrica emplea a 4,000 trabajadores directamente y otros 10,000 indirectamente en proveedores, se espera que en la próxima década se generen 69,000 nuevos empleos y las autoridades desean que la mayoría viva en esta nueva ciudad diseñada para alojar a 100,000 personas.
La planta de San José también utiliza las mismas técnicas inteligentes de Bruselas, Ingolstadt y otras plantas de Audi. De hecho, la planta de México fue la primera planta de Audi que se diseño con el uso de técnicas virtuales y de simulación. Según Hubert Waltl, miembro de la junta de producción y logística de Audi y presidente de Audi México, gracias a las técnicas avanzadas de simulación en el diseño de la fábrica, Audi consiguió poner en funcionamiento la planta un 30% más rápido que en anteriores ocasiones. La fábrica completa, incluidos los talleres de prensado, carrocería, pintura y ensamblado se construyó en un tiempo récord de tres años y medio. También utiliza la tecnología más vanguardista para controlar los procesos de producción.
Cuenta con un parque de proveedores anexo con siete proveedores y empresas logísticas, Faurecia, Hella-Behr-Plastic Omnium (HBPO), Thyssen Krupp, TI, Truck & Wheel, Kuehne + Nagle y Syncreon, que entrega las piezas en secuencia. La planta cuenta con más de 100 proveedores directos y llevó a más de 60 empresas a invertir en México en nuevas instalaciones o renovaciones, con lo que el Q5 alcanzó el nivel de contenido local del 70% (América del Norte).
China: El mercado más importante de Audi En China, la más antigua de las operaciones internacionales de Audi, la empresa continúa expandiéndose con sus socios actuales y con la posibilidad de nuevas asociaciones a largo plazo. Además de su dilatada asociación con FAW, Audi trabaja también con SAIC, asociada en China a las marcas Volkswagen y también GM desde hace muchos años.
En octubre de 2018 comenzó a trabajar en una nueva fábrica en Shanghái donde VW-SAIC construirá un Audi eléctrico en 2020; es probable que se añadan otros modelos en el momento oportuno. Esta planta tendrá una capacidad de 300,000 unidades anuales y costará 17 mil millones de yuan ($2,500 millones). Como parte de la inversión Audi adquirió una participación del 1% en SAIC-VW, por lo que el grupo VW posee en conjunto una participación del 50% en la empresa conjunta, donde tuvo desde el principio una participación minoritaria del 49%.
Audi planea lanzar para 2022 10 modelos eléctricos puros en China, la mitad de los cuales se producirá localmente. Se trata de parte del plan de doblas las ventas en China para 2023 a partir de las 600,000 unidades de 2017. La estrategia de Audi de un crecimiento tan notable se debe al rápido crecimiento de la demanda de vehículos eléctricos, estimulada en gran medida por la política gubernamental. Pero también ha sido posible gracias a la decisión de abril de 2018 de reducir las restricciones de propiedad extranjera en China. El gobierno chino ya no exigirá que las empresas extranjeras se limiten a dos empresas conjuntas en el país y también podrán ser propietarias al 100% de sus operaciones en lugar de requerir socios. Por ello es muy probable una planta que sea de Audi al 100% en un futuro cercano.
"Audi toma decisiones en base a su lema ‘En China, para China’ – la marca reconoce la necesidad de aumentar su presencia en el país a medida en que se convierte en el mayor mercado de vehículos eléctricos del mundo"
Antes de la llegada de los modelos eléctricos Audi expande también su rango estándar de modelos SUV, especialmente las versiones de batalla ancha. El modelo Q5L (producido en una nueva planta de 150,000 unidades anuales en Changchun, que cuenta con más de 500 robots de soldadura y pintura. Aunque también con una gran proporción de piezas producidas en México en kits CKD) se lanzó a principios de 2018. Se le suma el modelo Q2L producido solo para China en la planta de la empresa conjunta FAW-Audi en Foshan, una fábrica que produce tanto modelos de Volkswagen como de Audi.
Audi también expandirá su actividad de I+D en China y para finales de 2023 contará con 800 proyectos de I+D en el país, muy por encima de los 280 actuales. Su próximo centro de I+D y pista de ensayos se inaugurará en la ciudad oriental de Wuxi durante el primer trimestre de 2019. Todas estas decisiones se realizan bajo el lema de Audi ‘En China, para China’ – la marca reconoce la necesidad de aumentar su presencia en el país a medida en que se convierte en el mayor mercado de vehículos eléctricos del mundo.
Además de expandir la producción en China, Audi también se expande en el sector de vehículos autónomos, con una asociación con Huawei confirmada en octubre de 2018. Esta asociación les llevará a desarrollar conjuntamente tecnología autónoma de nivel cuatro, algo que exigen las medidas de seguridad en China. China permitirá a las empresas a tener una participación mayoritaria o del 100% en operaciones de producción, pero no podrán operar individualmente en sectores estratégicos que utilizan mapas y demás información relacionada con la seguridad. Por ello Audi colabora con Huawei y Mercedes formó una asociación similar con Baidu. Estos procesos serán cada vez más importantes, ya que Audi pretende mantener su independencia dentro del creciente Grupo Volkswagen.