El fuerte crecimiento de la producción en Polonia, Hungría, la República Checa, Rumania y Eslovaquia significa que Europa del Este sigue siendo muy atractiva para los OEM
A finales de los 90 y a principios del 2000, Europa del Este (hasta la frontera rusa) recibió una inversión sustancial de fabricantes de vehículos europeos, japoneses y surcoreanos que buscaban un bajo coste de fabricación para vehículos y componentes. La mayoría de las principales marcas de vehículos han invertido en la región, y aunque los costes de hacer negocios allí han subido, siguen invirtiendo. Mercedes, por ejemplo, ha confirmado oficialmente la construcción de una planta de motores en Polonia, que será su primera fábrica de motores europea fuera de Alemania. Esta decisión se debe en parte a los costes más competitivos de Polonia respecto a Alemania, pero los factores fundamentales son la falta de capacidad de producción en Alemania y la necesidad que tiene Mercedes (al igual que otros fabricantes de vehículos) de equilibrar su producción en el país y en la más amplia región europea.
Aumento de la producción en toda la regiónEn los últimos años la producción ha aumentado fuertemente en Polonia, Hungría, la República Checa, Rumania y Eslovaquia, siendo esta última la más beneficiada, con una producción de más de 1 millón de vehículos en 2015 y crecimiento adicional previsto. El Grupo VW fabricó casi 400.000 vehículos el año pasado, Kia 338.000 y PSA algo más de 303.000. Todas estas plantas planean nuevos modelos y un aumento de los volúmenes de producción, y pronto se les unirá Jaguar Land Rover: en 2018 la empresa del Reino Unido abrirá en Eslovaquia su primera planta en Europa continental, siendo el esperado reemplazo del Defender el primer vehículo que saldrá de la línea de montaje. La capacidad inicial será de 150.000 unidades y se añadirán a la gama Defender varios modelos aún por determinar; a más largo plazo esta nueva planta podría aumentar la producción a 300.000 unidades anuales, comparable a los recientes volúmenes de producción de las demás plantas en el país.
La planta de PSA en Eslovaquia es un caso interesante: PSA necesitaba mover la producción lejos del alto coste de Francia y su planta eslovaca vio subir la producción casi un 19% en 2015; y habiendo llegado a algo más de 303.000 unidades el año pasado, la planta producirá 315.000 unidades en 2016, 345.000 en 2017 y 360.000 en 2018. Históricamente el Peugeot 208 ha representado la mayor parte de la producción, con un 85% en 2015, pero al fabricarse el nuevo Citroen C3 en Eslovaquia (el nuevo C3 Picasso se trasladará a Opel en España), a largo plazo el C3 representará alrededor del 35-40% de la planta de PSA en Eslovaquia. PSA está considerando una nueva planta en Europa del Este, ya que busca reducir aún más su dependencia de las plantas de producción francesas, sobre todo para los automóviles pequeños.
Fuerte crecimiento en la República ChecaEn la República Checa se produjeron casi 1,3 millones de unidades en 2015, un aumento del 3% sobre 2014. La producción de la planta checa de Hyundai aumentó un 11%, siendo de más de 342.000 unidades, con el objetivo de 350.000 unidades para 2016. La producción de Skoda (y SEAT) en la República Checa continúa aumentando también. Con el fin de ayudar a que la filial SEAT obtenga beneficios, VW ha decidido que algunos modelos recientes y futuros de SEAT se basen en vehículos Skoda y que Skoda se encargue de la producción de estos modelos; el SEAT Toledo es a efectos prácticos un Skoda Rapid, y el nuevo SEAT Ateca también lo fabricará Skoda; en los próximos cinco años es posible que Skoda también produzca un segundo SUV de SEAT.
La expansión de las marcas premium en HungríaUno de los desarrollos notables de los últimos años ha sido el crecimiento de la producción de vehículos y motores de Audi en Hungría. Más recientemente, Mercedes también ha acelerado la producción de automóviles en este país. JLR producirá pronto en Eslovaquia y Porsche iniciará la plena producción del próximo Cayenne en la fábrica de VW en Eslovaquia, por lo que pronto se producirán en la región más de medio millón de vehículos de marcas premium. Mercedes Hungría ha confirmado que en 2016 invertirá 1.000 millones de euros en una segunda nave de montaje de automóviles de tracción delantera y trasera; se espera que Mercedes traslade de Bremen a esta planta parte de la producción de la Clase C para aliviar el estrés de la planta de Bremen, que tiene una de las configuraciones de producción más complejas de todas las fábricas de Mercedes.
Los OEM surcoreanosHyundai y Kia han abierto fábricas de automóviles, motores y transmisiones en la República Checa y Eslovaquia, además de haber traído a más de una docena de proveedores surcoreanos a la región para que les suministren; sus plantas de automóviles pueden producir más de 300.000 vehículos al año y las plantas de motores y transmisiones cuentan con una capacidad total similar, los cual les permite ser autosuficientes en estas áreas clave. Hyundai-Mobis, que fabrica módulos frontales y componentes del chasis en particular, y Dymos, un fabricante de asientos y espuma de poliuretano, son los mayores inversores surcoreanos en la región. Mientras que la mayoría de las empresas de vehículos en Europa del Este usan sus plantas allí para el suministro a la UE, Hyundai y Kia dirigen su producción a otros mercados, especialmente a Rusia, y en el caso de Hyundai el i30 se exporta a Australia.
Europa del Este no es sólo para los mercados de la UENo sólo Hyundai y Kia exportan fuera de Europa. Por ejemplo Fiat, que recibió la financiación del Banco Europeo de Inversiones, se hizo cargo de la antigua planta de Yugo en Zastava, Serbia, donde produce en exclusiva el 500L, una pequeño monovolumen de 5 y 7 plazas. La mayor parte de las 100.000 unidades producidas allí se destinan a la UE (y alrededor del 5% a los EE.UU.), pero también se exportan a Rusia; y tras un acuerdo firmado en agosto de 2016, el 500L se venderá en otras partes de la región euroasiática, esencialmente en los antiguos estados soviéticos de la CEI, tras el acuerdo de Kazajstán, país que se había resistido a un acuerdo de libre comercio con Serbia. Estos mercados adicionales tienen el objetivo de evitar más recortes de empleo en esta planta, que ha pasado de tres a dos turnos este año y recortado 900 puestos de trabajo de su máximo de 3.200.
En Polonia GM produce el coupé-cabrio Cascada, que se vende como el Buick en América del Norte y el Holden en Australia, junto con los modelos de Opel/Vauxhall para el mercado europeo. El suministro a Australia comenzó en febrero de 2015, los modelos de Buick se empezaron a exportar en noviembre de ese año, un mes después de que se comenzaran a producir los primeros modelos de Buick. Se espera que a finales de año se empiece a enviar a Australia las versiones Holden del Astra.
En Hungría, Suzuki ha estado produciendo automóviles y SUV desde hace más de 20 años. En la actualidad produce el crossover SX4 y el SUV Vitara; mientras que el SX4 se produce en otras partes del mundo, el Vitara solo se produce en Hungría. Brasil es otro mercado de exportación, con exportaciones a partir de finales de 2016.
Menos dependencia del alto coste de Alemania Mercedes produce automóviles en Hungría, donde se encuentra en proceso de doblar la capacidad, y transmisiones en Rumania; y para principios de 2019 estará produciendo motores en Jawor, en el suroeste de Polonia. Se invertirán alrededor de 500 euros para producir motores diesel y gasolina de cuatro cilindros.
Volkswagen ha ampliado su gama de vehículos comerciales con una nueva planta en Polonia que producirá el Crafter, un modelo que anteriormente fabricaba Mercedes bajo un acuerdo OEM. VW ha invertido 750 millones de euros en una nueva planta en Poznan, junto a su fábrica existente que fabrica la pequeña furgoneta Caddy y la furgoneta de tamaño medio Transporter; con la nueva operación producirá hasta 100.000 unidades al año, un incremento sustancial respecto a las 30-40.000 unidades que tradicionalmente suministraba Mercedes.
Baza de negociación con los sindicatosFiat ha utilizado durante mucho tiempo su planta polaca para aplacar las demandas de los sindicatos italianos. Ahora que Fiat va a transformar su producción italiana para centrarse en los SUV de Fiat, Jeep y Alfa Romeo, y una gama más amplia de modelos de Alfa Romeo, el único automóvil que probablemente Fiat vaya a producir en Italia es el Panda. Junto al 500L fabricado en Serbia, el 500 se produce en Polonia, que es donde Fiat también producirá el sustituto del Punto, que previsiblemente se llamará el 500 Plus.
Los conflictos laborales nunca andan lejosAudi ha sido uno de los grandes inversores en Hungría, con una inversión de más de 8.000 millones de euros desde que inició sus operaciones en el país en 1993; emplea directamente a más de 11.000 personas en su planta de Gyor, que fabrica motores TDI y los automóviles A3 y TT. Para 2018 comenzará la producción del nuevo Q3, haciéndose con la producción de la planta de SEAT en Barcelona. No obstante, durante 2016 la planta ha sufrido la amenaza de huelgas, con los trabajadores exigiendo 100.000 forintos como bono de una sola vez y un aumento de 20.000 forintos en el salario mensual, equivalente a un aumento del 6% que los sindicatos quieren que se aplique con efecto retroactivo al 1 de enero 2016. Continúan las negociaciones.
El crecimiento ha llevado a la escasez de mano de obraEn Eslovaquia y Hungría hay otros problemas laborales. De hecho se informa de escasez de mano de obra en Eslovaquia (y otras partes de la región); las inversiones continuadas traen la demanda de más trabajadores cualificados, en 2015 los fabricantes de vehículos y proveedores comenzaron a experimentar dificultades para contratar personal suficiente, y cuando pueden reclutar están teniendo que pagar salarios más altos de lo esperado. Hungría también se enfrenta a la escasez de mano de obra, una situación un tanto irónica dada la negativa del gobierno de ese país a aceptar inmigrantes de Siria y más allá. Una de las causas de la escasez de mano de obra en Hungría es que la gente de la zona de Gyor se desplaza para trabajar en la planta de VW en Bratislava.
Parte de la producción se va Europa del EsteDacia (propiedad de Renault) ha sido el principal impulsor del aumento de la producción de vehículos en Rumania en los últimos años. En tanto que la producción del Duster ha crecido fuertemente en los últimos tiempos, Dacia ha decidido no ampliar la planta de Pitesti y en su lugar trasladará la producción del Logan Break (la versión familiar) a la nueva planta del grupo Renault en Tánger, Marruecos; esta planta se encuentra en una zona libre de impuestos, lo que significa que los vehículos producidos allí se pueden importar a la UE sin pagar aranceles de importación. Una de las razones que contribuyeron a que Dacia decidiese no expandirse en Rumania fue la negativa de las autoridades de Rumania a mejorar la infraestructura de carreteras dentro y fuera de la planta; sin esto la expansión de la producción en Rumania hubiera sido inviable.
Ford aprovechará la capacidad de Rumania... por finDurante muchos años, Ford ha operado su planta de Craiova por debajo de su capacidad, con un máximo de 70.000 monovolúmenes B-Max al año, muy por debajo de su capacidad anual de 300.000 unidades. Ahora, tras muchos intentos fallidos y promesas no cumplidas, finalmente parece que Ford Rumanía tendrá una gama de modelos que aprovechará esa capacidad, o al menos hará un mayor uso de la planta que hasta ahora. Se van a invertir 200 millones de euros en la planta para fabricar el SUV EcoSport del segmento B, invirtiéndose la mitad de esta cifra durante 2016; y se invertirán 30 millones de euros adicionales en la producción de motores. La producción del EcoSport se iniciará en el cuarto trimestre de 2017; es posible que se añada una versión europea del nuevo Ka (que inicialmente se producirá para Europa en Brasil) a esta planta antes del final de esta década.
Los proveedores siguen a los fabricantes de vehículos hacia el esteNo sólo se están expandiendo los fabricantes de vehículos en Europa del Este; numerosos proveedores han seguido a las empresas de vehículos a la región, para suministrar a las nuevas fábricas de vehículos y también a Europa Occidental. Las inversiones en 2016 incluyen:• SC Rolem está invirtiendo 15 millones de euros en dos nuevas plantas en Rumania para fabricar componentes embellecedores de plástico para BMW, Mercedes, Volkswagen y Volvo entre otros.• La empresa afiliada HIB Rolem Trim está invirtiendo en otra planta de Rumanía con Ningbo HuaXiang Electronics para fabricar elementos decorativos para paneles de instrumentos, consolas centrales y revestimientos de puertas para las gamas Clase A y Clase B de Mercedes.• Johnson Controls (que con la separación de su negocio de asientos pasará a llamarse Adient) ha ampliado su producción de espuma de PU en Zory, Polonia; se habrán invertido 20 millones de euros (22 millones de dólares) para el año 2019.• En el sur de Serbia la italiana Aunde, fabricante de asientos y componentes de asientos, ha ampliado una fábrica que originariamente suministraba al Fiat 500L, tras adjudicarse un contrato de Mercedes; y Leoni, una empresa alemana de cableado, está invirtiendo 22 millones de euros en dos nuevas plantas en Serbia para suministrar a BMW y Jaguar Land Rover.• En Hungría, Dana está ampliando la producción de componentes de engranaje con una inversión de 15.000 millones de forintos, y el proveedor de electrónica japonés Mitsuba abrirá una nueva planta en Hungría, con una inversión de casi 14 millones de euros, de los cuales 2,75 millones son de una subvención del gobierno húngaro. La tercera gran inversión en Hungría durante 2016 es de ThyssenKrupp, que está invirtiendo 100 millones de euros en la fabricación de componentes de motor y de la dirección. Esta nueva planta será la primera de ThyssenKrupp en Europa que fabrique dos conjuntos de componentes en la misma planta; en 2018 comenzará la producción de las tapas de culata, con levas integradas, y de los componentes de la dirección electrónica.