Una nueva alianza de colaboración de 20 millones de libras pretende innovar, desarrollar y producir diversos componentes de automóvil; AMS pudo visitar la nueva instalación de ensamblado de The Proving Factory' en Coventry
Crear un proveedor automotriz de primer nivel desde cero en solo unos años parece una tarea difícil, pero esta empresa cuenta además con algunos retos adicionales: en primer lugar, no solo produce un producto o familia de productos, sino que fabrica más de 20 dispositivos a partir de diversos diseños; en segundo lugar, estos dispositivos son productos innovadores que proceden de pequeñas empresas y que pretenden promover el cambio a vehículos con menores emisiones de carbono en la producción en masa.
Este es el plan de negocio y es cada vez más una realidad, The Proving Factory es una aventura emprendedora de 20 millones de libras que se lanzó formalmente en 2013 para desarrollar nuevas ideas de productos de pequeñas empresas del RU para luego producirlas en masa, entorno a las 20.000 unidades anuales, que puedan interesar a un proveedor de primer nivel ya establecido para que asuma la producción o para apoyar al desarrollador original de la tecnología para que lo haga por su cuenta. Richard Bruges es el director ejecutivo y comenta que al fin y al cabo "la base del negocio es conseguir que las empresas puedan abrirse camino", al igual que con sus productos.
Bruges hizo estas declaraciones en febrero de este año en la apertura de la planta de ensamblado de The Proving Factory a las afueras de Coventry, en el núcleo tradicional de la industria automotriz en el Reino Unido. La iniciativa se ha asociado con una planta de producción en Rotherham, South Yorkshire, que comenzó a funcionar en octubre del año pasado y entre ambas constituyen una iniciativa de producción automotriz que probablemente sea única en el mundo.
Pero, ¿cómo se organiza un proyecto así para explorar un territorio desconocido? Algo que no hace es considerarse a sí mismo como un simple taller de mecanizado con un catálogo variado de productos. El director de operaciones para la producción de componentes en Rotherham, Nick Andrew, enfatiza que la organización tiene que combinar sus procesos de producción con una fase inicial de desarrollo para optimizar las posibilidad de éxito comercial.
Una fábrica flexible
La planta de Rotherham ocupa 1.000 metros cuadrados en una nave con temperatura controlada y 4 elementos principales de equipo de producción: un par de centros de mecanizado, una rectificadora universal y una fresadora, más algunos equipos de medición de coordenadas. Andrew asegura que esta maquinaría les proporciona la flexibilidad necesaria para, por ejemplo, realizar operaciones “tipo fresado y torneado” y también el mecanizado de engranajes y yugos.
[caption id="attachment_64812" align="alignleft" width="350"]Producción de componentes en la planta de Rotherham