Al igual que sus competidores en el segmento de marcas premium, Audi está estableciendo una red global de fabricación
La expansión geográfica más allá de Alemania de la producción de vehículos de Volkswagen a México, China, España, India, Brasil y Sudáfrica ya es una realidad. La expansión paralela de Audi es mientras tanto, con la excepción de China, un fenómeno mucho más reciente.
A pesar de las penurias financieras que supone el escándalo de las emisiones de diésel para el grupo VW, Audi quiere intensificar su nuevo desarrollo de modelo y su expansión física invirtiendo cantidades record en 2016. Se evidencia un progreso considerable y en este análisis se examina lo que la marca ha logrado hasta la fecha, en tanto que intenta reducir su dependencia tradicional de sus operaciones de fabricación en Alemania.
En el Salón del Automóvil de Ginebra a principios de este año, el CEO de Audi, Rupert Stadler, anunció que la compañía invertiría más de 3.000 millones de euros (3.400 millones de dólares) en 2016, en 20 modelos nuevos o revisados, y que escalaría la electrificación y la digitalización de su línea de productos. La inversión incluye la expansión dentro de Alemania, asignando la mayor parte de la inversión interna a finalizar las disposiciones necesarias para fabricar el nuevo Q2 en Ingolstadt y la segunda generación del Q5 en México. Por otra parte, según el CFO de Audi Axel Strotbek, la marca se encuentra actualmente en medio de "la fase de inversión más grande en la historia de la empresa". Las inversiones fuera de Alemania se están acelerando también, tal y como veremos a continuación.
La inversión de 2016 y de los años venideros se basa en las ventas récord de 2015, que fueron un 3,6% más que en 2014, con más de 1,8 millones de vehículos vendidos en todo el mundo. Audi ha reportado también unos ingresos récord de 58.400 millones de euros, aunque los beneficios de explotación de 4.800 millones de euros se han mantenido estables. Esto se debe al efecto de los llamados "artículos especiales"; esencialmente los costos asociados a la debacle de las emisiones. Audi ha declarado en este sentido que Volkswagen se hará cargo del desembolso para la corrección de fallos de los motores TDI de cuatro cilindros, y no afectará a Audi.
Las principales plantas de producción de Audi están en Ingolstadt, su planta doméstica al norte de Múnich que se centra en los A3, A4, A5 y Q5, y la planta de Neckarsulm, cerca de Stuttgart, que fabrica los A6, A7, A8 y una pequeña proporción de la producción del A4. El primer movimiento de la marca fuera de Alemania fue a Hungría, hogar ahora de la producción del TT y también de una importante planta de motores. Audi también está establecida en China desde mediados de la década de 1990 mediante una empresa conjunta con FAW. La gama de productos realizados en Hungría ha crecido recientemente, y también se producen ahora vehículos de Audi en España y Bélgica. Fuera de Europa, una nueva expansión en China y las nuevas operaciones en Brasil están en marcha, y se espera que la producción en México comience a finales de 2016.
La expansión de la fabricación de Audi tiene que ser vista en un contexto más amplio, que se basa en la decisión del grupo VW de considerar a cada una de sus principales plantas de ensamblaje capaces de fabricar una amplia gama de vehículos basados en una de las mega-plataformas del grupo. Por ejemplo, la planta de Hungría es una fábrica MQB (bloque de construcción transversal modular), siendo posible la fabricación completa del A3 allí, y también se encargará de la producción del Q3. Del mismo modo, la planta de Seat de Martorell en Barcelona es una planta MQB Zero centrada en los vehículos del segmento B. Esto explica por qué se trasladará la producción del Audi A1 a España una vez se inicie la producción del nuevo modelo en 2018.
El SUV más grande de Audi, el Q7, lo fabrica Volkswagen en la planta de Bratislava, junto con su vehículo hermano el Volkswagen Touareg. Se continuará con esta disposición en un futuro previsible.
BélgicaLa planta de Bruselas fabrica actualmente el A1, tal y como lo ha hecho desde el lanzamiento del modelo, y continuará haciéndolo hasta finales de 2017. Desde principios de 2018, el modelo sustituto se fabricará en España. La planta se encuentra ahora en un proceso de modificación para producir el nuevo vehículo eléctrico de Audi, que según se prevé se llamará Q6 e-tron. Será un SUV crossover, una versión prototipo que fue mostrada en el Salón de Frankfurt 2015. El gobierno belga ha aportado una subvención de 100 millones de euros para respaldar las modificaciones en la fábrica, y se espera que Audi invierta cerca de 600 millones de euros.
El Q6 e-tron tiene como objetivo la gama totalmente eléctrica donde Tesla tiene cada vez más éxito. Audi ha decidido claramente que necesita una instalación dedicada para implementar su estrategia competitiva. El vehículo es tan importante para el futuro de Audi como lo es la planta para el sector de la fabricación en la región; se mantendrán 2.000 puestos de trabajo en la planta y, según el gobierno belga, también se crearán o protegerán hasta 6.000 puestos de trabajo en la cadena de suministro y el sector terciario ligados a la planta.
La producción del A1 ha sido de más de 100.000 unidades al año desde el inicio de la producción, pero la producción del más caro Q6 e-tron será menor. Las indicaciones iniciales sugieren que la producción será de alrededor de 60.000 unidades al año hasta al menos el año 2025. Además de la producción del vehículo, la planta de Bruselas producirá las baterías para alimentar el Q6 e-tron, y muy probablemente otros vehículos eléctricos de la gama del grupo VW en el futuro.
EspañaCon el fin de ayudar a mejorar la situación de la planta de Seat en Martorell, Barcelona, Audi le asignó la producción de su SUV compacto Q3, una decisión facilitada por la falta de capacidad disponible en las propias plantas de Audi en aquel momento. La producción de alrededor de 100.000 Q3s por año ha ayudado a estabilizar las finanzas de Seat, pero la producción del próxima modelo - que se fabricará sobre la plataforma MQB, junto con el Audi A3 y el TT - se llevará a cabo en la planta de Audi en Hungría.
Como resultado, las primeras unidades del nuevo modelo ya no saldrán de la línea de producción de Barcelona a partir de 2018, y al mismo tiempo terminará la producción del A1 en Bruselas. La planta de Martorell está siendo reconfigurada para producir una gama de modelos basados en la plataforma MQB Zero, la versión de la mega-plataforma MQB dedicada a los vehículos del segmento B. Otros vehículos fabricados en la plataforma MQB Zero son el Volkswagen Polo, el Seat Ibiza y el Skoda Fabia (el primer vehículo que fue producido sobre esta plataforma en 2014).
"La marca se encuentra actualmente en medio de la fase de inversión más grande en la historia de la compañía" - Axel Strotbek, CFO de Audi
HungríaLa producción del primer TT en Gyor a finales de 1990 representó el movimiento de Audi hacia los segmentos roadster/cabrio compactos, y también su primera planta de producción europea fuera de Alemania. La más reciente tercera generación del TT comenzó su producción a mediados de 2014. El TT se fabrica en la misma línea de producción de los A3 cabrio y sedán. Se han producido hasta la fecha más de medio millón de TT cupé y roadster. Aunque aún no se ha alcanzado la capacidad total en Gyor, se entiende que la planta podría producir hasta 300.000 vehículos al año, una cifra que puede lograrse con el siguiente Q3 y si la gama del A3 sigue siendo tan exitosa como lo ha sido en los últimos años.
La planta de Gyor emplea a más de 11.000 trabajadores y es también sede de una importante instalación de producción de motores. Allí se fabricaron mas de 2,25 millones de motores en 2015, una cifra récord que superó en 50.000 unidades la producción de 2014. Del mismo modo, la producción de vehículos de 2015 ascendió a más de 160.000 unidades, estableciendo un récord y superando la producción de 2014 en 25.000 vehículos.
MéxicoA finales de 2016, se iniciará la producción de la segunda generación del Q5 en la nueva planta de Audi en San José Chiapa, en el estado de Puebla. Para cuando la planta comience la producción, se habrán invertido un total de 1.300 millones de dólares para llegar a fabricar 150.000 vehículos al año en lo que es la primera planta independiente de Audi fuera de Europa (sus operaciones en China son empresas conjuntas y la planta brasileña cuenta con una fuerte implicación de Volkswagen). La localización del estado de Puebla fue elegida en parte debido a la buena infraestructura que se encuentra en proceso de mejora, pero también debido a los vínculos establecidos con Volkswagen; el Beetle ha sido producido en las inmediaciones desde la década de 1960.
La base de proveedores de la región del TLCAN no está tan desarrollada como Audi quisiera, con más de un tercio de los componentes del Q5 procedentes de Europa y gran parte del resto procedentes del otro lado de la frontera en los EE.UU.. El uso de proveedores europeos ha supuesto que Audi haya tenido que ajustar su plazo normal de ocho semanas para poder configurar su programa de fabricación. Para México, el plan de producción tiene que ser fijado con 11 semanas de antelación para permitir el transporte trasatlántico.
La de San José Chiapa será la planta principal para el Q5, trasladando la función desde la planta de Ingolstadt, donde se fabricó el modelo de primera generación. Ya existe en China una segunda línea para el Q5 y producirá también los modelos de segunda generación. Mientras que la planta china producirá para el mercado chino, la planta mexicana lo hará para todo el mundo, con cerca del 50% de la producción mexicana destinada a Europa, casi el 40% a América del Norte y el resto dividido entre Asia (excluyendo a China), Australia, Sudáfrica y América del Sur. Exportando más allá de América del Norte un porcentaje tan alto, la planta de Audi superará las cifras obtenidas por otras plantas mexicanas que en la actualidad tienden a exportar sólo alrededor del 20% de su producción más allá del área del TLCAN.
Una vez en funcionamiento, la planta empleará a 4.200 trabajadores (600 de los cuales han sido entrenados en instalaciones de Audi en Alemania). La plantilla producirá vehículos de motores convencionales y una variante híbrida enchufable. Se dice que tendrá un rango eléctrico de alrededor de 30 millas.
BrasilHasta el año 2006, Audi producía en Brasil una primera versión del A3 hatchback en la planta de Volkswagen en Sao José dos Pinhais; este programa concluyó debido a la situación económica y la disminución de las ventas de Audi en el país. El sector de la automoción en general se ha recuperado y las perspectivas para los vehículos premium en el país son buenas de nuevo, por lo que para Audi (y de hecho también Mercedes) fabricar modelos compactos premium en el país vuelve a ser algo atractivo.
La producción de Audi en Brasil se reinició en septiembre de 2015, después de un paréntesis de casi una década, tras una inversión de 500 millones de reales brasileños (144 millones de dólares). El primer modelo producido allí fue el A3 sedán, y la producción del Q3 se inició en marzo de 2016. En comparación a la planta mexicana es una operación pequeña, con una capacidad de producción inicial de sólo 26.000 unidades al año - 16.000 para el A3 y 10.000 para el Q3. La producción se dirigirá al mercado local al menos inicialmente, aunque las exportaciones regionales futuras no se deben descartar.
ChinaAudi ha estado produciendo vehículos en China a través de su asociación con FAW en la planta de Changchun desde 1996, cuando comenzó la producción china del Audi 200. Changchun produce ahora las versiones de batalla larga de los sedanes A4 y A6 y también los SUVs Q3 y Q5. El A4L y A6L fueron los primeros vehículos premium de batalla larga fabricados en China, una estrategia que Mercedes y BMW han seguido posteriormente. Del mismo modo, el Q5 fue el primer SUV premium fabricado en China, un enfoque que posteriormente adoptaron Mercedes (GLK) y Jaguar Land Rover (Evoque y Discovery Sport). Con algo más de 490.000 Audi vendidos en China en el año 2015 (la mayoría de los cuales también fueron fabricados allí), China es en realidad el mayor mercado de Audi. La planta de Changchun fabricó en total cerca de 434.000 Audi en 2015.
A finales de 2013, con la planta de Changchun cerca de su capacidad, se abrió una segunda línea de Audi en China en la planta de Foshan, en la provincia de Guangdong en el sur del país. Allí se producen los A3 sportback y sedán, pero sólo para el mercado local. En 2015 se fabricaron algo más de 56.000 vehículos, pero la capacidad de la planta de Foshan es mucho mayor. En su configuración actual se podrían fabricar al menos 150.000 unidades al año, aunque los informes han sugerido que de las líneas de Foshan podrían salir hasta 300.000 unidades al año sin inversión adicional significativa. Se informa que la compañía está considerando la ampliación de esta planta para llegar a 450.000 o incluso 600.000 unidades al año. Tal ampliación implicaría probablemente una extensión de la gama que Audi produce en el país, siendo el próximo SUV pequeño Q2, que utilizará la misma plataforma MQB de los A3 y Q3, el modelo que más probablemente se fabrique en Foshan.