Geely recurre a su marca Volvo para desarrollar y producir modelos Lynk & Co y ofrecer nuevos sistemas de venta y mantenimiento. Artículo de Ian Henry

Lynk & Co 01

La nueva marca china Lynk & Co ha creado una gran expectación muy rápidamente. Cuando el primero modelo 01 salió a la venta en China recibieron 6,000 pedidos online en menos de tres minutos. Lynk & Co es la quinta marca de un creciente grupo que pertenece a Geely. Además de la marca del mismo nombre en Chin, adquirió Volvo, London Taxi Company y Lotus. Su propietario, Li Shifu, se ha convertido también en el mayor accionista de Daimler.

Ahora Geely ha desarrollado una segunda marca, Lynk & Co, un nombre que Ford ha acusado de parecerse demasiado a su propia marca Lincoln. Estaban previstas vistas judiciales a finales de 2017 pero desde entonces no ha habido novedad en frente legal. El holding empresarial de Geely, Zhejiang Geely, cuenta con el 50% de las acciones de Lynk & Co, mientras que las marcas Geely Automobile y Volvo cuentan con un 25% cada una.

Lynk & Co se lanzó en 2016 y Volvo colaboró en el desarrollo de la plataforma CMA que servirá de base para los primeros modelos de la marca. Su objetivo es vender 500,000 vehículos al año hasta 2021 (aproximadamente la misma cifra que Volvo vende hoy en día), y se espera que la mitad se venda en China y la otra mitad entre Europa y Estados Unidos. Las ventas comenzaron en China a finales de 2017; en Europa y Estados Unidos estaban previstas para finales de 2018 pero se han retrasado hasta principios de 2019 en Europa y ligeramente más tarde en Estados Unidos. En Europa las ventas comenzarán en Alemania, especialmente en Berlín, en Estados Unidos el primer punto de venta será San Francisco.

Plataformas compartidas

La marca eligió un sistema de denominación muy sencillo, el primer modelo es un SUV compacto con la misma base que el XC40 de Volvo, con motor de gasolina de tres cilindros y un doble embrague que utiliza la serie 40. El objetivo del 01 es competir con el Nissan Qashqai, o Rogue Sport en Estados Unidos. Los próximos modelos de la marca serán un crossover compacto denominado 02, un sedán compacto, 03, y un hatchback que se llamará 04. Los siguientes modelos serán un SUV más grande y es posible que parte de la producción se realice en Estados Unidos, lo que sugiere la posibilidad de que se basen en la plataforma SPA de Volvo.

Algunos artículos de prensa a principios de 2018 sugerían que la producción en Estados Unidos podría realizarse en Ridgeville, Carolina del Sur, donde Volvo inaugurará una planta este año para producir modelos en la plataforma SPA. Los modelos Lynk & Co eléctricos contarán con las mismas conexiones, baterías, motores eléctricos y sistemas de carga previstos para los modelos de Volvo.

Los autos se basarán inicialmente en la plataforma CMA desarrollada para la serie 40 de Volvo. La producción china se realizará en una nueva planta en Luqiao, que producirá modelos de la serie 40 de Volvo y también autos de Lynk & Co. Se espera que la producción en Europa se realice en la planta de Volvo en Bélgica, aunque todavía está por confirmar. Se espera que la decisión llegue a finales del segundo trimestre de 2018.

Rompiendo el molde en ventas y mantenimiento

Uno de los aspectos más interesantes de la nueva empresa es que pretende distanciarse de los concesionarios tradicionales. El vicepresidente sénior de Lynk & Co, Alain Visser, comentó ante la prensa a finales de 2016 que el clásico modelo de concesionario está “roto”. Está previsto que la mayoría de las ventas o alquileres sean por internet, pero habrá espacios físicos donde puedan interactuar cliente y empresa, como puntos en centros comerciales o locales puntuales.

Los autos serán en ‘propiedad’ a través de suscripciones mensuales, con una oferta de un nuevo modelo después de dos años. De esta manera Lynk & Co pretende vender autos como si fueran contratos telefónicos, en lugar de realizar rentar a tres o cinco años.

Además, la empresa reducirá costes al ofrecer un número reducido de versiones y el mantenimiento se realizará en los concesionarios de Volvo (una opción sencilla ya que utilizan las plataformas desarrolladas por Volvo) y en algunos en centros independientes. Los clientes recibirán el automóvil en su casa, de donde también se retirará cuando requiera mantenimiento.